Con la cantidad de mensajes de difusión de animales abandonados actualmente en todas las redes sociales, ¿A cuántos de nosotros se nos ha venido a la mente en algún momento adoptar un perrito o un gatito? Creemos que la respuesta es muy fácil: a todos. Y es que es lo más humano. Y en nuestra clínica, haciendo un poco de reflexión, creemos conveniente opinar al respecto sobre una decisión tan importante y que podría cambiar nuestras vidas en un futuro inmediato.
Compartir nuestra vida con un perro o un gato es una oportunidad para canalizar nuestro afecto, ¡Es una fuente de lecciones diarias de respeto y tolerancia! Debe ser cuidado y respetado durante toda su vida, por lo que no es de extrañar que nuestro peludo nos ayudará a aliviar el estrés del día a día y que nos aumentará los sentimientos de felicidad y responsabilidad a unos altísimos niveles. Además, será un buen motivo para trabajar en equipo y compartir responsabilidades por lo que de buen seguro ayudará a mejorar la comunicación y la convivencia en vuestra familia.
Si realmente estás planteándote adoptar, éste articulo te podría ser de gran ayuda, ya que intentaremos tocar el tema a fondo.
Antes de dar el paso se deben tener en cuenta varios aspectos que van a ser muy importantes si decides compartir tú vida con él. No están ordenados por orden de importancia ya que todos van a serlo por igual a la hora de tomar una decisión.
¿Estáis todos listos en tu núcleo familiar y lo tenéis hablado?
Resulta vital para una buena convivencia que se tenga consensuado con toda la familia, que se tengan en cuenta todos los factores, alergia, aceptación, implicación, etc.
Aquí podríamos añadir otra pregunta, ¿os vais a poder comprometer durante toda la vida de vuestro compañero para estar por él?
La esperanza de vida promedio de un perro gigante ronda entre los 9 a los 11 años. La de los pequeños y los gatos de 12 a 14 años pero, indiferentemente de la media, debemos tener claro que el compromiso es para toda su vida.
También podríamos prever que en nuestra familia podría llegar, por ejemplo, un bebé. O cambiarnos de casa. O de estilo de vida y ¿Nuestro perro o gato seguiría teniendo sitio en ella?
¿Vais a tener tiempo, todos los días para dedicarle a vuestro compañero?
Debéis saber que él tendrá unas necesidades que vamos a tener que cumplir todos los días. Indiferentemente del clima o de si hemos tenido un mal día.
Requerirá, por ejemplo, de:
En caso de adoptar un perro deberás sacarlo a pasear, como mínimo, tres veces al día (en caso de ser adulto) y, una de las tres, deberá ser un paseo un poco más largo donde él pueda ejercitarse, olisquear y relacionarse con otros perros. Por lo qué, por lo mínimo deberás dedicar entre 45-60 min cada jornada en pasearlo.
También queremos comentar que los cachorros necesitarán entre 4-5 paseos al día debido a que no tienen tanto control de sus esfínteres, por lo que deberás empezar a conocerlo y predecir cuando es más propenso a hacer sus necesidades (después de comer, al levantarse por las mañanas, después de una sesión de juegos, por ejemplo) para intentar acostumbrarlo a hacer sus necesidades fuera del hogar.
Todos los animales domésticos necesitan realizar actividades mentales y físicas díarias que beneficiarán su estado de salud física y mental, cumplir con estos ejercicios será muy importante para asegurarse de tener nuestro compañero feliz y equilibrado emocionalmente.
Tener cura de su alimentación, higiene y aseo va a ser fundamental para prevenir problemas derivados de un animal descuidado, algunos aspectos a tener en cuenta serán:
Cambiarle el agua todos los días y darle, si se puede, una de baja mineralización.
Ofrecerle una alimentación equilibrada y sin subproductos animales.
Limpiarle semanalmente los oídos, tener cura de sus uñas y de su salud dental mediante barritas dentales, cepillados de dientes y el uso de un colutorio específico para animales en el agua para ralentizar la producción de sarro.
En caso de animales de pelo largo deberá acostumbrarse a cepillarlo diariamente (los nudos son muy dolorosos y puede originar un problema de piel) y hacer del cepillado algo positivo, ya que dependerá de ello que sea una buena experiencia para el animal y se lo pondrá mucho mas fácil para llevarlo a cabo.
En caso de tenr un gatito, cambiar la arena 3 o 4 veces por semana.
¿Estáis listos para asumir el gasto económico que requieren?
La llegada de un nuevo miembro de la familia siempre va a suponer un gasto más, si lo adoptáis de cachorro deberemos prever, como mínimo:
Las desparasitaciones externas e internas, las vacunas, la identificación obligatoria (chip y censo en el ayuntamiento local), la compra de un comedero, bebedero, cama, juguetes. Una alimentación adecuada a su edad y la esterilización.
Después, a modo preventivo, deberemos vacunarlo anualmente, desparasitarlo internamente cada 3 meses, externamente cada mes y hacerle una revisión anual. Además, sería conveniente asumir que, dado que hablamos de un ser vivo, podría ponerse enfermo, comer cosas que no tocarían y diversos imprevistos que dependerán del estado de salud de cada animal.
Por último, añadiremos que si se adquiere un perro considerado de raza potencialmente peligrosa (Rottweiler, Tosa Inu, Fila Brasileiro, American Staffordshire Terrier, Pitbull Terrier, Staffordshire Bull Terrier, Akita Inu, Dogo argentino) deberá suponer que le pedirán cumplir los requisitos legales para la obtención de una licencia PPP que son: obtener un certificado de aptitud psicológica y física, un certificado de antecedentes penales, contratar un seguro de responsabilidad civil sin franquicia y un certificado veterinario del perro. Que deberá presentar en el registro.
Debemos darle tiempo para que se adapte a las normas de su nuevo hogar.
Es así, necesitaremos prepararnos psicológicamente para aceptar que nuestra mascota requerirá de tiempo para adaptarse a su nuevo hogar y, no será una semana, ni un mes probablemente (ya sea porque llegará muy jovencito, como si se trata de un adulto).
En estos casos podemos prevenir riesgos: Haciendo cambios en casa, ya sea poniendo fuera del alcance, o protegerlo, plantas o decoraciones, vallando el jardín, etc. Los pequeños cambios en la vivienda pueden ayudar a nuestro compañero a adaptarse a su nuevo entorno.
Queremos recalcar otra vez, ya que lo consideramos muy importante, que debemos estar listos para cuando el perro o el gato hagan de las suyas. Aunque hay veces que no se da el caso, nuestro animal inconscientemente hará alguna cosa que a nosotros no nos hará mucha gracia como: romper algo delicado, volcar el cubo de la basura, ladrar o maullar en exceso o simplemente el hecho que el animal dejará pelos donde se pose.
Desgraciadamente este punto es vital y posiblemente la causa de muchos abandonos. Pero, con paciencia, se pueden encontrar soluciones para que la convivencia con nuestra compañero sea del todo placentera.
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